Las memorias de Mamá Blanca
Teresa de la Parra
En un relato con tintes autobiográficos, Teresa de la Parra descubre el espacio rural venezolano desde la mirada de seis jóvenes niñas. Lejos de la capital y la influencia de la urbe, la hacienda Piedra Azul aparece como un refugio donde confluyen personajes de variados linajes que dibujan un cuadro único e íntimo de un tiempo que ya parecía lejano a principios del siglo XX.
"En Las memorias de Mamá Blanca, la escritora de origen venezolana da cuenta de su amplio conocimiento cultural, sus vivencias en Europa y América y nos retrotrae en el tiempo a una Venezuela rural y aristocrática en la que los signos de los tiempos están cambiando y ponen en tela de juicio los valores tradicionales".
Juan Pablo Rodríguez Méndez
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Nació en París, Francia, en el año 1889, hija de un cónsul venezolano.
Su padre murió cuando ella tenía nueve años. El año siguiente, De la Parra se mudó con su madre y hermanos a España para terminar sus estudios escolares.
A los veintiún años regresó a Venezuela con un especial interés en retratar los infinitos matices de la cultura y la sociedad venezolana. En 1920 publicó su “Diario de una caraqueña por el Lejano Oriente” en la revista Actualidades, dirigida por Rómulo Gallegos.
En 1923 se mudó a París para dedicarse a la escritura y al año siguiente publicó “Ifigenia”, que fue traducida al francés. Su segunda novela, “Las memorias de Mamá Blanca”, se publicó en 1929, también en París. Para 1930 ya era reconocida como una de las voces narrativas más importantes de América Latina.
Murió de tuberculosis en 1936, en Madrid. Para el centenario de su nacimiento, los restos de la autora son trasladados al Panteón Nacional de Venezuela en 1989.
es ilustradora, diseñadora gráfica, música y artista visual. Le gusta dibujar las cosas simples, por ejemplo las frutas del desayuno, las flores y los jarrones de su casa. Canta en El grilo, ensamble vocal; da talleres de arte a niños y adultos y está trabajando en su primer libro de poesía.
